La vida es más extraña que en los cuentos!

domingo, 29 de julio de 2012

Confesiones Terrestres


Bueno, resulta que debo confesarme de algunas cosas: 

1.- No estoy en absoluto concentrada. Y la verdad, ni siquiera 
intento encontrar una solución oportuna. Cada vez que intento realizar una tarea, vienen a atacarme una serie de imágenes bien originales, que exigen les ponga atención. Hace poco rato, por ejemplo, empezó a sonar un disco favorito mío y me transportó hasta tiempos futuros que ni siquiera sé si vendrán. La cosa es que de repente empecé a verme yo viajando por muchos lados y plantando muchos vegetales (últimamente, plantar en mi huerto urbano es lo que me hace más feliz). ¿Será que ahora la desconcentración toma control de mí?

2.- He comenzado (más bien me he forzado) a poner atención preferencial a los sujetos que transitan por las calles. Antes nunca hice algo así, y más bien por el contrario: mi panorámica visual al caminar por las calles ha sido hasta ahora el cielo, las nubes, los graffitis, los árboles, y un sinfín de cosas, a veces desapegadas del suelo, que me han significado varios costalazos gratis. Entonces este suceso es realmente histórico. He descubierto lindos terrícolas. Y feos terrícolas. ¿Será que al dirigir mi vista a mis co-terrestres ahora, dejaré de ser invisible?

3.- Tengo un codo chueco. Sí, del terror. Tuvieron que pasar 26 años para recién enterarme que, esa vez que me arranqué de mi mamá y me saqué la mugre y me quebré el codo, tenía consecuencias fa-ta-les. Y no exagero al decir que es fatal, ya que no hay asana (postura) en yoga que no tenga que modificar la posición de mi codo para que no me duela. Entonces el panorama ahora es que tengo un lado normal (el derecho) y otro chueco (el izquierdo).  ¿Será que mi lado chueco irá a agarrar algún superpoder?

4.- Conocí un extraterrestre. La verdad no puedo dar mucho más detalle por miedo a que descubra que estoy hablando de él, pero por ahora puedo decir que conoce harta música terrestre y música terrestre media extraterrestre, como por ejemplo Scott Walker. Tiene los típicos problemas de un extraterrestre de visita en la tierra: gastritis, un poco de miopía, problemas de memoria a corto plazo, entre otros. Lo bueno es que, a pesar de que no puedo enviarle mails sino cohetes, me cae extremadamente bien. ¿Será que con esta amistad se abrirá para mí una posibilidad de viaje al espacio?

No sé qué más confesar por ahora, cierre de las transmisiones, con Bjork.

jueves, 26 de julio de 2012

Más lenta o qué

Es Julio. Casi Agosto.
Y, dirán ustedes, terrícolas todos, qué tiene eso de importante?
Nada probablemente. Sólo un mes más, de muchos meses que vendrán por delante en mi vida. O un mes menos, no lo sé bien.
Lo cierto es que vine a compartir un sentir que tengo en el alma, que no sé si es nostalgia o qué.

Es como si fuera a despertar mañana teniendo 13 años,
que según yo fue mi época más lúcida.
Y me fuera a dormir con el uniforme puesto, para no tener que pasar frío en la mañana.
Es como si ahora mismo estuviera luchando con mi Mamá, que me dice que vaya a lustrar los zapatos para mañana, y yo pensara que hay cosas más importantes por hacer, como por ejemplo escribir mis sueños.
Como si tuviese la fé de que las cosas que voy a dibujar en mi cuaderno se van a materializar dentro de los próximos años, meses, días, horas, minutos o segundos.
Como si fuera a escribir 100 cartas de amor a la misma persona, que por cierto, ni sabe de mi existencia.
Como si de la nada fuera a aparecer un ovni.
Como si de la nada fuera a desaparecer yo.
Como si no sé.

Estoy menos lúcida o qué?
Estoy más lenta o qué?
Estoy más flexible o qué?

Sí, estoy más flexible.
Y como prueba de esto, mi progreso en Adho Mukha Svanasana:
Y de regalo, lo que dijo mi yogur de esta mañana:
Buenas Noches!

miércoles, 18 de julio de 2012

Mañas Mías Uf Uf

Señoras y Señores, terrícolas, Imaginari@s tod@s:


El Tíbet sigue siendo esclavo. 
Las bolsas plásticas siguen existiendo.
Las luces de las tiendas siguen quedando prendidas de noche.
Perros siguen siendo envenenad@s.
Siria sigue en guerra.
Los televisores siguen prendidos.
Y así, quinientas mil millones de cosas siguen sucediendo. Porque el mundo no se detiene.


Yo me pregunto si es que cuando yo llegué a este mundo las cosas estaban igual. 
Y me respondo que lo más probable es que sí, pero como yo era guagua, no me afectaba mayormente. 
Así que mi conclusión es la siguiente: vas creciendo, te vas haciendo más consciente, y al mismo tiempo van apareciendo muchas cosas por las cuales sufrir. Krishnamurti dice algo parecido pero de una forma mil veces más inteligente e iluminada: dice que tod@s sufrimos en este mundo actual, y que ese dolor es igual en tod@s, y sería uno de los elementos que nos une como especie. También dice que el Amor es lo más bacán del universo y única clave para salvarse. Y yo sé eso, pero como le decía a la Vere la otra vez, es verdaderamente extraterrestre aprender a transformar el miedo, resentimiento, rabia u odio en amor.


Y lo digo porque, a raíz de ciertos sucesos históricos semestrales en mi vida, hoy en día me cuesta mucho muchas cosas... Ya no confío en mi espontaneidad a toda prueba, ya no me atrevo a lanzarme al vacío, ya no sé leer señales, ya no muchas cosas. Y ojalá fuera entretenido, como me ha sucedido en épocas pretéritas, pero esta vez no lo es. 


Ahora reflexiono más (sí, es posible) respecto de muchos asuntos, y me vuelvo a dar cuenta de que claro, las cosas son re simples en la vida real, pero por alguna misteriosa razón yo siempre me duelo por todo, pues para mi pocas cosas son simples. Cada pequeña cosa la transformo en una gran historia. Las bolsas plásticas son una historia, el agua que corre es una historia, la alimentación es una historia, la basura que proviene de mí es una historia, el Tíbet es una historia, lo que diga es una historia, lo que no diga es una historia, si lo que compro está hecho por niños es una historia, ay por Dios. 


Por qué nací con tantos significados? La cabeza me pesa de seguir sosteniéndolos todos. Voy a adquirir algún poder sobrenatural al sostener todas estas mañas mías?


Me canso.


Y bueno, les dejo con George, Be here Now!
 

martes, 10 de julio de 2012

El Mangazo Verde

Eran las 4 de la tarde y ya iban dos desafíos a la autoridad. Mi abuela (La Mimi) le había dicho dos veces al Johnny bien clarito "no te cuelgues de las ramas" (del sauce, que estaba en el antejardín). Él no hizo caso y yo esperé a que hiciera el ademán de ir a colgarse por tercera para salir corriendo desde dentro de la casa, a la velocidad de la luz, en dirección hacia él. Esta vez no me importarían los mocos que el Johnny tenía siempre justo arriba del labio. Y así fue: hizo el ademán de ir a colgarse por tercera. Y mientras yo corría hacia él, podía sentir algo dentro de mi pecho, como un viento  muy frío que me daba impulso. Mis moños se movían, respiraba agitada, fruncí el entrecejo, empuñé la mano derecha y algo grité. Algo así como EL ÁRBOL TIENE ALMA! Mientras grité, mi puño fue directo al labio superior del Johnny. 


Después de sentir húmedo mi puño no recuerdo muy bien la escena. Vi al Johnny ponerse rojo y salir arrancando. Miré hacia la puerta de la casa y vi a mi abuela poner cara de espanto. Miré rápido en todas direcciones, por si venía mi mamá o algún vecino. Yo también salí corriendo, igual de rápido que llegué, hacia el interior de la casa. Y esta vez no sentía frío en el pecho sino caliente. Me pregunté si así sentirían mis heroínas de la televisión cuando luchaban contra el mal. No me respondí. Nunca alguien me ha respondido eso.

Cuando mi Mamá llegó del trabajo ese día mi abuela le contó todo. Me castigó. 
Yo supuse que así iban a ser todas las historias de mi vida: injusticia-mangazo-calor. Pero al final fue: injusticia-mangazo-castigo. 
Desde ahí en adelante nunca más opté por el mangazo.
Pero es que el Johnny tenía que entender que a los árboles no se les hace sufrir.


Les dejo uno de mis videos favoritos. Dance Tonight.
Buenas Noches!